Parece que cuando llega el frío empezamos todos a recoger las terrazas, balcones y jardines.
Pues os he de reconocer que yo no recojo mi terraza en todo el año, y es que los que tenemos la suerte de vivir por Alicante y alrededores, tenemos que reconocer que excepto algún día suelto, casi cualquier día se puede desayunar o merendar en exterior o incluso por qué no, tomarnos una cervecita antes de comer, eso sí, con alguna adaptación que «caliente» un poquito.